Durante unos instantes siguió la lagartija a la chinche, sacó la lengua y lo que percibió no debió agradarla así que... decidió no incluirla en su dieta y siguió su camino.
Las lagartijas tienen dos órganos de Jacobson en la zona anterior del paladar, a ellos son conducidas las partículas olorosas mediante la punta de la lengua, así recogen información del entorno.
La chinche es una Pentatoma rufipes llamada el error de los bosques.
Cuando se las molesta (y yo lo hice al empujarla con una yerba para verla mejor) emiten un líquido maloliente cuyo aroma se debe a compuestos como el cianuro, quizá por eso pasó de largo la lagartija.
Las fotografías son del 3-08-2015
No hay comentarios:
Publicar un comentario